miércoles, 20 de noviembre de 2013

"PROHIBIDO SUICIDARSE EN PRIMAVERA"

Realmente un excelente libro de Alejandro Casona, cortito y simple, pero sin desperdicio. Una lectura recomendable para un día de lluvia, ya que puede leerse en una tarde junto a un café o mates.
Lugar: un hospital de almas para gente suicida, donde cada uno deberá elegir su muerte deseada, una muerte poética, heroica.
En esta obra, la muerte toma un color cómico, y la vida se convierte en la meta de todos los personajes.

Les dejo un fragmento del acto 1 y una gran enseñanza...a no espera nada de la vida, sino terminaremos en desilusiones.





jueves, 24 de octubre de 2013

Mi primera publicación






Gracias a un amigo cibernético, pude publicar mi primer cuentito en formato papel, en una revista de la patagonia argentina llamada Pro-letrarios. El cuento es uno de mis preferidos "El otro" y se encuentra publicado desde hace tiempo en uno de los primeros post de este blog.
Realmente estoy muy agradecida por la invitación y por el espacio otorgado.
El formato papel sigue siento (para mi) uno de los mejores soportes para difundir la literatura.

viernes, 4 de octubre de 2013

Un diario de viaje...










A poco días de conmemorarse un nuevo aniversario del mal llamado "Descubrimiento de américa" es necesario recordar "Los Cuatro Viajes del Alimirante" o popularmente conocido como "El diario de Colón".
Un texto que sinceramente resulta denso, aburrido y complicado por su español casi antiguo (con muchas marcas de oralidad) pero que sin embargo es uno de los primeros testimonios de aquellos hechos que darían un gran giro en la historia de la humanidad.

Ese libro, que hoy podemos encasillar dentro de lo "literario" formó nuestro imaginario social por mucho tiempo; varías de las concepciones que tenemos hoy en día sobre los indios, fueron impuestas por una mirada colonizadora, ya sea la de considerar a los indios como ignorantes o como una cultura bárbara.
La diferencia fue lo que creo esas concepciones, los españoles marcaron su mirada entre lo conocido y lo que no, ellos sin duda eran diferentes así mismo y por tanto eran inferiores, "casi animales".
Escribir en la diferencia fue lo que autorizó la gran masacre que vendría después. Al considerarlos animales sin lenguaje ni religión podían ser tratados y maltratados como se quisiese, destruyendo no sólo vidas, sino culturas, lenguajes, creencias.

Los conquistadores impusieron todo, su mundo se incrustó en américa de la peor manera.
Si bien en "El Diario de Colón" no se nombra la gran masacre que tiempo después se libraría entre indios y españoles (unos por defender sus tierra y otros por poseer el oro) vemos como el interés y sólo el interés por conseguir riquezas mueve al "dominador". La excusa será la de siempre, la que rigió por siglos nuestra historia "LA RELIGIÓN", se conquista y se mata porque no se tiene el mismo dios, pero la realidad sin duda resulta ser el tan sangriento metal dorado que tantos males ocasiona. 

Los indios hubieran dado sin resistirse todo el oro que tenían, porque ellos consideraban que había cosas más importantes de ese inútil metal, sin embargo la ambición de los españoles (en un primer momento, después fueron portugueses, ingleses, etc.) los llevo a querer más y más de lo que éstos tenían.
Hubiera sido interesante tener un texto, que al igual que "El Diario de Colón" dé cuenta de la mirada de los aborígenes ¿Qué pensaban? ¿qué querías? ¿qué sentían?... sólo tenemos intuiciones, nada certeras por cierto.

Los invito a leer "El Diario de Colon", no garantizo el disfrute de la lectura, pero si su goce, ya que inevitablemente nos veremos reflejados en muchos entredichos del discurso. No creamos en la palabra absoluta de nuestro narrador, ya que es su mirada y no la verdad de los hechos.



viernes, 17 de mayo de 2013

La literatura siempre tiene algo que decir a la realidad.

17-05-2013... Un día que pasará a la historia de nuestro país. Cómo dije en otro de mis blog, Videla murió y con él se llevó miles de verdades aún sin rebelar, miles de historias que esperaban ser contadas, mientras que acá, en la realidad cotidiana quedan esas madres que quieren saber sobre dónde están sus hijos, dónde están sus nietos.
Pero bueno... podemos asegurar que aquí en la tierra hay un genocida menos.


OBITUARIO CON HURRA por Mario Benedetti (1963)


"Los canallas viven mucho, pero a veces se mueren". 

Vamos a festejarlo 

Vengan todos 

Los inocentes 

los damnificados 

los que gritan de noche 

los que sueñan de día 

los que sufren el cuerpo 

los que alojan fantasmas 

los que pisan descalzos 

los que blasfeman y arden 

los pobres congelados 

los que quieren a alguien 

los que nunca se olvidan 



Vamos a festejarlo 

Vengan todos 

el canalla se ha muerto 

se acabó el alma negra 

El ladrón 

El cochino 

se acabó para siempre 

hurra que vengan todos 

Vamos a festejarlo 

a no decir 

La muerte 

Siempre lo borra todo 

Todo lo purifica 

Cualquier día 

La muerte no borra nada 

Quedan Siempre las cicatrices 

Hurra 

murió el cretino 

Vamos a festejarlo 

a no llorar de vicio 

que lloren sus iguales 

y se traguen sus lágrimas 

se acabó el monstruo prócer 

se acabó para siempre 

Vamos a festejarlo 

a no ponernos tibios 

a no creer que éste es un muerto cualquiera 



Vamos a festejarlo 

a no volvernos flojos 

a no olvidar que éste 

es un muerto de mierda. 

sábado, 4 de mayo de 2013

Perdón por no publicar tan seguido

A mis lectores:

El motivo de este post es para disculparme por no publicar tan seguido, es que el trabajo y el estudio no me dejan mucho tiempo libre.
Les cuento que estoy preparando una materia que se llama "Literatura Hispanoamericana" y es bastante complicada y compleja, por tanto y para no perder contacto con mis lectores, propongo dar una pequeña vuelta de tuerca al blog y agregar semanalmente un pequeño comentarios del libro que estoy leyendo y que conforma el curriculum de dicha materia.
Así y como popularmente se dice "mato dos pájaros de un tiro" estudio y posteo...
Luego sí, prometo volver a mi escritura y trabajos de análisis que tan le gustan a mis lectores.

desde ya un saludo.

NO SOY LITERATURA

jueves, 21 de marzo de 2013

sueños rotos

No nací para cumplir mis sueños...

perdida en la tiniebla de mi infinita razón,
comprendo tardíamente que todo es imposible.
Que todo se convierte, en un sin fin de caminos,
que sin meta alguna, impiden mi caminar.

Estoy cansada de buscar,
de pelear por sueños que nunca han de cumplirse.

Sola, y solamente me encuentro en las noches
para sin saber por qué seguir respirando.

No quiero seguir.
Me rindo en el rincón oscuro de sueños rotos
y torpes decisiones que me destruyen lentamente.

Lloro de impotencia.

Buscaba arduamente llegar al sueño cumplido de estar donde deseo...
pero todo es ilusorio.

Caigo cada vez más bajo en un intento por levantarme y seguir adelante.
deseo no existir más en este mundo sin fortuna,
donde nadie me esperaba,
donde nadie me espera.



miércoles, 23 de enero de 2013

TE QUIERO


Qué más que escuchar este bellisímo poema de la voz de su autor. ¿Quién pudiera cantarle al amor de la manera en que Mario Benedetti lo hace?
Sólo un grande en las letras puede salir de las palabras trilladas para decir aquello que aún no se ha dicho sobre ese sentimiento tan lindo que es el amor.

"Si te quiero es porque son mi amor, mi cómplice, mi todo" 




miércoles, 9 de enero de 2013

Diez años después, volví a verte.




Primero de enero del 2013.
De noche, en la penumbra me esperabas.
Sabíamos, que luego del festejo el encuentro sería inminente.
El verano, rememorando el invierno nos lleno de frio, pero esta vez, diez años después, el abrazo caluroso nos estaba prohibido.
Nos miramos como vez primera, nos miramos como hace diez años.
Nos saludamos con un beso en la mejilla, y aunque los años habían pasado por el tiempo, nuestros cuerpos, nuestras miradas, estaban tan igual a aquella vez en que decidimos despedirnos.
Programamos un plan perfecto, un plan limitado a lo posible: mates es tu casa.
Recorrimos juntos aquel camino que tantas veces nos condujo hacia el amor, ese camino de memoria, ese camino ciego que luego de pasar noches con amigos, música y alcohol nos conducía aún cuando la noche era joven hacia el rincón de la ciudad donde íbamos a amarnos.
El presente y el pasado parecían fusionarse por momentos en mi memoria. La mujer que soy había muerto de repente para darle vida a la niña inmadura, virgen y enamorada de hace diez años.  No era yo, ni era el presente, quizás fue un sueño o un viaje al pasado, una falla momentánea de la máquina del tiempo.
Llegamos al lugar perfecto, ese lugar que guardaba aún mi tesoro más preciado y aquellos secretos incontables de madrugadas y tardes maratónicas de sexo. Sentí que íbamos a eso, que nuestro final sería en la cama, sentí que pronto me tomarías de la cintura para llevarme hasta tu cuarto y que los besos corpóreos, los besos en la boca y las lenguas harían lo suyo, lo que más les gusta.
Pero nada de eso pasó, diez años después el mundo era otra cosa.
Antes de entrar me dijiste la primera frase que como una especie de contraseña o condición imperfecta me dijiste hace diez años “por favor, no te asustes por el desorden, entende que mi vieja ya es una señora grande”, ahí fue cuando comprendí que la fusión era casi perfecta, inevitablemente en algún punto, el ayer y el hoy se chocaban, se unían para decirnos algo, pero no supimos comprenderlo.
Diez años después nos remitimos sólo a tomar mates, y  a contar nuestros proyectos, hablamos (como hace diez años) de hijos y de casamiento, pero esta vez cada uno lo hizo como proyecto propio.
Nos comportamos como gente madura, aunque nuestros niños, filtrados en nuestros ojos, delataban la travesura de quiera busca el juego, lo prohibido y el actuar por instinto. No permitimos la libertad de éstos, los censuramos como  padres exigentes.
Aunque fueron horas de mates, el tiempo tramposo se escurrió en un minuto, y lo subjetivo del  tiempo fue comprendido por mí en un instante.
No quería, realmente no quería dejarte, quería quedarme a tu lado, estar contigo más tiempo, decirte que el tiempo se perdió, que ya no estamos en el presente, que yo no era la Jime adulta, que tenía 17 años, que aún éramos novios y que nuestros sueños y proyectos se encontraban en pie; pero  la madurez es razón pura.
Me llevó hasta mi casa, me toco el cabello y aunque quiso decirme algo, se contuvo y se fue.